Una referencia que nos puede servir de entrada para saber hasta dónde llega Robles son los letreros que situados en la carretera delimitan el casco urbano. Por desgracia sólo hay tres de los cuatro que debería haber, uno entrando desde Naredo, otro entrando desde Pardavé, y otro entrando desde Palazuelo de la Valcueva. El cuarto que debería señalizar la entrada en el casco urbano entrando desde Matallana de Torío hace años que no existe, y cuando existía, no estaba en el lugar apropiado.
Otra segunda posibilidad es recurrir a la información que nos aporta el Catastro. De ahí obtenemos la siguiente silueta del territorio de Robles. En ella podemos apreciar a grosso modo tanto las zonas urbanas, como las rurales que forman parte del pueblo.
Pero sin duda la mejor herramienta de que disponemos para nuestro propósito es GoolzOOm. Este servicio de Google nos permite aunar en una sola imagen las informaciones aportadas por el Catastro, el SigPac y Google maps.
A - Límite sur de Robles:
Saliendo por la carretera en dirección a Pardavé, a poco de pasar La Pontona veremos a mano izquierda un camino que bajando del monte desemboca de forma perpéndicular en la carretera. Este camino, que conduce a Vallifondo, y a laFuente del Vaquero, es el límite sur de Robles. Hay que tener cuidado de no confundir este camino con otro que desemboca unos metros más allá de forma oblicua en la carretera, justo enfrente de la minicentral, y que ya está situado en el término de Pardavé.
Para que lo veáis con claridad os dejo imágenes extraídas de GoolzOOm y de SigPac que para más detalle os aconsejo que ampliéis haciendo clic con el puntero del ratón. El límite viene marcado en la imagen de GoolzOOm por la linea +-+-+-, y en la del SigPac por la cruz blanca. Usaré imágenes semejantes para ilustrar el resto de los límites.
B- Límite este de Robles:
Saliendo por la carretera en dirección a La Valcueva, poco después de dejar atrás la última casa del pueblo, la carretera se aproxima al arroyo (La llamada Presa de Robles), ese es el límite.
C- Límite norte de Robles:
Saliendo por la carretera en dirección a Matallana de Torío, nada más pasar la última casa del Barrio de San Lorenzo, la carretera se aproxima al río. Ahí esta el límite. La llamada Fábrica de la Hullero Vasco Leonesa recientemente demolida, ya está en territorio de Matallana.
D- Límite oeste de Robles
Este límite no lo voy a ilustrar, porque viene definido de forma nítida por el Río Torío que separa a Robles de Naredo a lo largo de su curso, con excepción de un pequeño tramo al norte en que separa Robles de Orzonaga tal como podéis ver en las imágenes correspondientes al Límite norte de Robles.
Notas:
- En la última década del siglo XIX y durante el siglo XX surgieron tres nuevos barrios de Robles algo separados del casco urbano: El Barrio de la Estación, el Barrio de Miranda, y el Barrio de San Lorenzo. Estos tres barrios y el resto de Robles, al ser en realidad un mismo pueblo comparten una misma Junta Vecinal.
- El primero en surgir fue el Barrio de la Estación que surgió alrededor de la estación de vía estrecha que se construyó en 1891. A esta estación de tren debido al capricho del alcalde de aquella época predemocrática que era natural de Matallana y un importante empresario minero se le puso el nombre de Estación de Matallana a pesar de estar situada en Robles. En 1925 se construyó en el Barrio de la Estación la Casa Consistorial, y Robles pasó a ser la capital del municipio.
- Toda esta situación de confusión empezó el día que en una estación de tren se puso un letrero que no correspondía. Quizá la subsanación de este "error original" sustituyendo el letrero por el adecuado (Estación de Robles de la Valcueva) pueda ser el principio de la solución que permita aclarar todas las confusiones a las que ese simple letrero ha dado lugar.
- Cuando se construyó el tren, otros pueblos (como Pedrún o La Vecilla) se vieron en circunstancias semejantes a Robles, y la estación se construyó alejada del núcleo urbano. Junto a estas estaciones también surgieron nuevos barrios, pero afortunadamente a nadie se le ocurrió poner el letrero que no debía.
