17 marzo, 2006

Gabino Álvarez Mata

Gabino Álvarez Mata, "don Gabino", como era conocido por las gentes de Robles nació el 19 de febrero de 1923 en la Mata de Monteagudo, fue ordenado el 7 de abril de 1946, y ejerció el sacerdocio primero en Valle de Vegacervera, luego en la comarca de La Cabrera, y desde el 31 de enero de 1951 como párroco de Robles de la Valcueva hasta su fallecimiento el 6 de junio de 2005 a los 82 años de edad de forma repentina por un fallo cardíaco.

Ha sido pues el párroco de Robles durante toda la segunda mitad del siglo XX, y ha sido para gran parte de los habitantes del pueblo el único que han conocido. Don Gabino sucedió al párroco anterior Don Lázaro Álvarez Rodríguez (que luego continuó su ministerio en Vegas del Condado), y a su vez fue sucedido por Don Óscar Rodríguez Martínez. Fue el párroco que inauguró la Casa Rectoral actual, anexa a la Iglesia de San Martín, aunque ya se había comenzado a construir antes de su llegada al pueblo. Ha estado presente en los momentos cruciales de la vida de la mayoría de los vecinos de Robles, a los que ha bautizado, dado la primera comunión, confirmado, casado, y oficiado el entierro. Ha atendido los dos templos de Robles (El de San Martín en Robles pueblo y el San Juan Bautista en el Barrio de la Estación), la Ermita de Boínas, y en ocasiones pueblos del entorno de Robles.

Durante su periodo de párroco acontecieron grandes transformaciones en la iglesia católica marcadas fundamentalmente por el Concilio Vaticano II (1962-1965), lo que supuso que en el oficio de la misa se abandonara el latín en beneficio de la lengua vernácula, que se despegara el altar de la pared y el cura dejara de decir misa de espaldas a la gente empezando a decirla de frente, que se dejara de usar por las mujeres el velo en la iglesia, que se sustituyeran los reclinatorios individuales por bancos corridos, que decayera el uso del misal por los fieles, que se abandonara el uso de la tonsura por los curas, y que en el ámbito del vestido a partir de 1966 se permitiera a los curas el cambio de la sotana por el cleriman, imagen esta con la que todos los que tenemos menos de 50 años recordamos a don Gabino.

Asimismo durante su periodo como párroco se acometieron varias reformas en la iglesia de Robles (iglesia de San Martín), a la que además se dotó de calefacción, y en la Ermita de Boínas, que fue reparada en varios ocasiones, y gracias a la iniciativa de Don Gabino, y con el apoyo del Ayuntamiento y de mucho fieles, se hizo una nueva imagen de la Virgen de Boínas en el taller del artista leonés Amado Fernández Puente para sustituir a la desaparecida durante la guerra civil, siendo la nueva imagen, que es la que en la actualidad está en la ermita, bendecida el 15 de agosto de 1975 por el secretario del Obispado, que llevaba la representación del señor obispo de León de entonces, el Sr. D. Luis María de Larrea y Legarreta.

Todos recordamos de don Gabino su hablar, a veces atropellado, su dedicación a la infancia y la juventud con iniciativas como el teleclub cuando no se había generalizado la presencia de televisores en las casas, y la biblioteca juvenil.

También recordamos la ayuda que prestaba a la gente poco instruida y generalmente de edad avanzada en la realización de trámites administrativos, su afición al cuidado de su huerta con los árboles frutales y su hábito de fumar cigarrillos que en última instancia pudo acortarle algo la vida.

Una vida tan larga como la suya es difícil de resumir en estas pocas lineas, que pretender servir de pequeño homenaje a su persona, quedando sin reflejar sin duda alguna muchos hechos que permanecen en el recuerdo de los que le conocieron. Como colofón de esta reseña añadimos una imagen de la Virgen de Boínas de la procesión del 15 de agosto de 2004, que fue la última a la que asistió don Gabino, y en la que se le puede ver en segundo plano. Creemos que esta es la forma en que sin duda querría ser recordado, junto a la Virgen de Boínas.

1 comentario:

Anónimo dijo...

He sentido una gran emoción al leer este articulo y a la vez que leía iba recordando tantas cosas sobre D. Gabino.
Recuerdo los Domingos después del rezo del rosario, nos ponía el cine mudo en el salón parroquial El teleclub. Comíamos pipas y chocolatinas que antes habíamos comprado en el bar de Justina y Teodomiro.
La Semana Santa en Robles ,el monumento , los Santos tapados de morado, cuando recorría con el Santísimo la iglesia, se respiraba el silencio y la fe de mi querida gente ,hoy la mayoría fallecidos, como no recordar los Viacruces con las voces ,tan bonitas de Delia, Maribí, Margo
etc..
Tengo muchos recuerdos y muy bonitos en torno a D. Gabino ,tendría un montón. El encuentro en la plaza del pueblo, los versos en el mes de mayo , las confesiones una vez al año acompañado de D. Lucas ,D. Amador sacerdotes de los pueblos vecinos, fallecidos todos ellos. Soy creyente gracias a usted D. Gabino por su fe vivida ,que supo transmitir sin muchas palabras,